Sabías que un elemento fundamental al momento de trabajar o realizar cualquier actividad que conlleve estar sentado, es tener la silla apropiada. Por eso, en Tienda MSA queremos evitarte molestias corporales y malas posturas, con esta pequeña guía sobre lo que debes tener en cuenta a la hora de elegir tu nueva silla.

Prefiere una silla ergonómica

Una silla ergonómica es la que propicia que mantengas una buena postura, para eliminar así la tensión de tu espalda, cuello y hombros. Por sus características, disminuye la sensación de cansancio aumentando el rendimiento.

Una silla para tu contextura física

No todas las sillas de escritorio serán cómodas y útiles para cualquier persona, hay que considerar la contextura física, el alto y el peso de quien la usará. El asiento debe ser amplio y acolchonado, con tamaño suficiente para que puedas apoyar los pies en el suelo, protegiendo las rodillas y dejando descansar la espalda sobre la silla.

Que sea una silla ajustable

Personalizar la silla es clave para un uso cómodo y duradero en el tiempo, por eso cuando te guste un modelo de silla de escritorio, fíjate en que puedas ajustar los apoyabrazos, la altura y la inclinación según tu contextura y tamaño. El alto de la silla de escritorio debe ser acorde, además de a tu contextura, al alto de la mesa o escritorio donde trabajarás

Una silla con estabilidad y movilidad

Una buena silla de escritorio debe tener puntos que den estabilidad a la base. Eso es muy importante para sentirse seguro y poder descansar mientras estás sentado. Si quieres una silla de escritorio con ruedas, debes fijarte en que la estabilidad también se mantenga mientras te mueves en ella.

Antes de comprar, revisa el tamaño de la silla, tanto en su base como en el asiento. Estas medidas deben coincidir con el espacio que tienes disponible junto a tu escritorio, considerando el espacio que ocuparás cuando estés sentado en ella.

Si decides adquirir una silla que tenga ruedas, es recomendable que tenga de 4 a 5 ruedas para garantizar mayor estabilidad. Verifica también que las ruedas se muevan con facilidad.

El material de la silla

Un aspecto esencial al momento de elegir una silla de escritorio es el material del que está hecha. El acolchado del asiento debe tener al menos 20 milímetros de espesor, con una densidad de 25 kilos por metro cúbico. Mientras que el acolchado del respaldo puede ser un poco menos espeso, con 18 kilos por metro cúbico es suficiente.

Para que al sentarte estés más cómodo, elige un tapiz o malla transpirable que sea de un material durable, capaz de soportar el uso continuo. La base o columna, por lo general, es de metal o acero, en algunos casos también puede ser de madera. El asiento, el soporte y las ruedas pueden ser de nylon o plástico.

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